Manifiesto conjunto de oposición a la propuesta de IDIS respecto a la lista de espera quirúrgica y al ánimo de lucro con recursos públicos, objetivo principal, del Pacto de la Sanidad Privada
En Junio de este año se dio a conocer el Pacto por la Defensa de la Sanidad Privada auspiciado por la CEOE. Después siguió la propuesta de hace unos meses lanzada por la fundación IDIS de poner en marcha un plan de choque para la resolución de las listas de espera quirúrgicas, el cual precisa una inversión a nivel nacional de cerca de 1.500 millones de euros, de los cuales 146 millones son los que debe aportar la Comunidad de Madrid.
Hace unos días hemos asistido de nuevo a la escenificación pública de alianzas de empresarios de la Sanidad Privada, los que pretenden ser un Lobby o grupo de presión, con el fin de conseguir de políticos y gobiernos, a nivel nacional y autonómico, el incremento y continuidad de la presencia e influencia de la sanidad privada en el sistema Sanitario Público.
El llamado Pacto en Defensa de la Sanidad Privada, es la carta de presentación a los medios y a los ciudadanos, de los intentos de consolidación de otra de las élites extractivas de este país, formado por empresas privadas proveedoras de recursos sanitarios y aseguradoras de salud, que desean expandir su volumen de negocio a costa del dinero destinado al sistema Sanitario Público.
Según los economistas Daron Acemoglu y James A. Robinson en su libro, Por qué fracasan los países, editorial Deusto, las élites extractivas de un país son aquellas que se apartan de la obtención del bien común y dedican sus esfuerzos a su propio bienestar y al del grupo al que pertenecen. Las instituciones extractivas concentran el poder en manos de una élite reducida y fijan pocos límites al ejercicio de su poder. Estas élites elaboran un sistema de captura de rentas que les permite, sin crear riqueza, detraer rentas de la mayor parte de la ciudadanía en beneficio propio. Estas élites extractivas se encuentran en el mundo de las finanzas, de la economía, de la política, los medios de comunicación y, desgraciadamente, en nuestra sanidad.
Este, malintencionadamente llamado ¨Pacto por la Defensa de la Sanidad Privada¨, intenta presentar la empresa de la Sanidad Privada, como víctima del vaivén de políticos y gobiernos. Con el uso exclusivo del lenguaje y la utilización de la palabra ¨defensa¨ en el título del pacto, la Sanidad Privada pasa de ser sujeto que amenaza al sistema Sanitario Público, debido al trato de favor que año a año recibe, a sujeto amenazado. Este intento de cubrirse con un traje de cordero y presentarse como víctima siendo verdugo, aunque algo ingenuo, no deja de ser efectista. Por supuesto este pacto no menciona la movilización social que se ha producido en los últimos años en contra de los intentos de privatización de la Sanidad. Los firmantes de este manifiesto esperamos y trabajaremos, para que, como en la fábula de Esopo, el ánimo de lucro a costa de recursos públicos de este pacto tenga un final con el que no cuentan aquellos que intentan disfrazarlo de buenas intenciones.
Huelga decir que el principal interés de la Sanidad Privada es el dinero. No estamos en contra de las empresas sanitarias privadas, pero ya que son negocios privados y tienen excelentes empresarios que no necesitan depender de los caudales públicos, ni de subvenciones para sobrevivir, deberían pensar hacer crecer sus negocios fuera de la órbita de lo público.
Tristemente aquí radica el gran problema, los fondos públicos, dinero de todos, dinero que debiendo destinarse directamente al sistema Sanitario Público, año a año se desvía, en cantidad creciente y sin control a unas cuantas empresas privadas proveedoras o no de servicios sanitarios. Lo peor es que estas, cada vez más, necesitan nutrirse con este dinero de todos, para seguir creciendo con recursos públicos y sin que este dinero revierta en mejoras reales para la comunidad.
Este pacto no solo reclama más dinero público, también exige se reconozca el papel complementario en el sistema sanitario y no ser discriminado por tener ánimo de lucro.
Según datos de IDIS, España está 3,1 puntos por delante de la media de la OCDE (27,1%) y de «la mayoría de los países de nuestro entorno» en gasto sanitario privado, pero este pacto pide más.
También, en pos de la mal llamada colaboración público-privada, que debería denominarse parasitación privado-pública del sistema sanitario, hace poco se mostró en la asamblea de Madrid que no solo busca nutrirse y mantener vivo al huésped, que sería algo malvado pero inteligente, busca llevarlo incluso a la extinción y como un tumor, ocupar todo el espacio o mercado posible, a sabiendas que la deuda maligna que genere, en caso de acabar con el huésped que parasita, será asumida por los ciudadanos.
La historia reciente de la gestión de la Sanidad Pública madrileña está marcada por los sucesivos intentos de privatización en un contexto político marcado por tramas corruptas hoy investigadas por la justicia, desde conciertos y externalizaciones en exceso ventajosas para las empresas privadas, pasando por la derivación coactiva y masiva de pacientes a clínicas privadas para realizar pruebas o intervenciones quirúrgicas, hasta la privatización en toda regla de Hospitales que se siguen pagando a un precio opaco y no justificable, con fondos públicos para beneficio privado y de los que hoy se aprueba la revisión de los contratos con el fin de que puedan no ser tan abusivos para el bolsillo de los ciudadanos de la Comunidad de Madrid.
En este contexto, el actual gobierno de la Comunidad de Madrid activó un plan para acabar con las listas de espera, con una dotación de 80 millones de euros, de 2016 a 2019, plan que esta siendo insuficiente o no hay voluntad de que se ejecute, pues el dinero presupuestado no se gasta, y parece que hay intención de no concluirlo. Cualquiera que lea el texto del “Plan Integral de Mejora de las Listas de Espera quirúrgica, de consultas y pruebas diagnósticas del Servicio Madrileño de Salud 2016-2019” se dará cuenta que deja de lado a los profesionales a los que acusa de la misma existencia de la lista de espera que el gobierno de Madrid creó con mimo y esmero desde el 2012, con la excusa de una crisis económica y una privatización de Hospitales masiva a la vista.
Hoy IDIS con gobiernos favorables pretende que creamos, que como buenos empresarios han descubierto oportunidad de negocio, gracias a las deficiencias que ha demostrado este ambicioso plan de listas de espera y se presentan como “salvadores” reclamando un rescate de 146 millones de euros a los madrileños para acabar con la lista de Espera quirúrgica, la misma lista que la Sra. Cifuentes y el Consejero de Sanidad pretendían resolver con tan sólo 80 millones. Pero el plan del IDIS es mucho más ambicioso, pretende abarcar todo el territorio nacional por 1500 millones de euros.
Las Asociaciones, Plataformas, Sindicatos, Agrupaciones de ciudadanos y Agrupaciones políticas firmantes de este manifiesto, como ya lo han hecho otras organizaciones, nos negamos a esta propuesta y consideramos obscena, la sola posibilidad de que pueda ser tenida en consideración por cualquiera de los Gobiernos de las 17 Comunidades Autónomas.
Nos oponemos así mismo, a que en la Comunidad de Madrid, su presidenta Sra. Cifuentes pueda no gastar los 80 millones presupuestados para acometer el plan en la Sanidad Pública y si pueda gastar casi el doble, 146 millones en esta propuesta privada.
La razón de nuestra oposición no es pequeña, caprichosa y menos falta de razón, en caso de que algún Gobierno Autonómico acceda a asumir y presupuestar la propuesta de IDIS, estará atentando directamente a la Libre Elección de los pacientes, pues las derivaciones de estos se consiguen mediante la coacción, resultado de una información sesgada y mal intencionada en cuanto al tiempo de espera en sus centros.
Nos oponemos porque las complicaciones que necesariamente surgirán de las más de 614.000 intervenciones que las Empresas Privadas proponen realizar, las asumirán los pacientes y la Sanidad Pública, sin ningún coste para estas empresas.
Nos oponemos a su vez, a que IDIS ponga precio a las listas de espera como si se olvidara que habla de pacientes pues estas intervenciones se realizan con ánimo de lucro y el paciente y su salud quedan en un segundo lugar.
Nos oponemos porque sacar a los pacientes de sus centros, interviniéndolos quirúrgicamente lejos de sus domicilios y devolviéndolos después de nuevo a sus centros, rompe la continuidad asistencial, merma la seguridad y la calidad de la atención que reciben y significa un trastorno para los pacientes y sus familias.
Nos oponemos porque 146 millones de Euros se extraerán de los recursos públicos de la sanidad lo que implica nuevos recortes en el Sistema Público y de forma directa en la atención de muchos pacientes.
Nos oponemos pues todas las medidas que proponen estas empresas privadas pueden realizarse en los centros públicos actuales, con menos inversión que la reclamada por IDIS.
Nos oponemos a que esta oferta, de precio tan absurdamente elevado, pueda siquiera tenerse en cuenta por pensar en los réditos electorales indirectos que genere la solución de las listas de espera quirúrgicas.
Los que suscribimos este manifiesto no tenemos nada en contra de la Sanidad Privada, es un negocio tan respetable como cualquier otro, siempre y cuando no salga de su ámbito, pero estamos en contra de la financiación de estas empresas con fondos públicos porque son los fondos del presupuesto que alimenta la Sanidad Pública, esto significa recortes a beneficio de los bolsillos de otros. Llevamos sufridos muchos recortes en la Sanidad Pública, promesas incumplidas, recortes en nuestros Centros sanitarios en los que se caen los techos, se inundan salas, anidan cucarachas en sus quirófanos. Recortes que tienen como resultado un aumento sin precedentes de las Listas de Espera, que han servido para dar una imagen deteriorada de nuestra Sanidad Pública y nefasta de nuestros políticos. Hechos que hacen pensar en una estrategia de desprestigio de lo público para dar paso a salvadores privados, estrategia de destrucción deliberada de uno de los mejores Sistemas Sanitarios del mundo para dejar los despojos como alimento de fondos buitre y empresas privadas.
Sra. Presidenta Cristina Cifuentes, hacer caso a esa oferta es reconocer su incapacidad de gestión, duplicar recursos y gasto para una misma causa, y un fraude a los madrileños: lo que usted es incapaz de hacer con 80 millones, lo harán fondos buitre y las empresas privadas por 146 millones de las arcas públicas.
Los que suscribimos este manifiesto llamamos a la suma a todas las organizaciones que defienden el sistema Sanitario Público, tanto a nivel de la Comunidad de Madrid como a nivel Nacional, o que en su defecto se manifiesten públicamente en contra de este Pacto y de la propuesta de IDIS que lo acompaña.
Firmantes:
ADECETMA – Asociación de empleados del centro de transfusiones de Madrid .
AFEM – ASOCIACIÓN DE FACULTATIVOS ESPECIALISTAS DE MADRID.
AME – ASOCIACIÓN MADRILEÑA DE ENFERMERÍA .
AUDITA SANIDAD – AUDITORIA CIUDADANA DE LA DEUDA EN SANIDAD.
MATS – MOVIMIENTO ASAMBLEARIO DE TRABAJADORES-AS DE SANIDAD.
PLATAFORMA AFECTADOS POR HEPATITIS C.
PLATAFORMA CENTROS DE SALUD.
PLATAFORMA EN DEFENSA DEL HOSPITAL 12 DE OCTUBRE.
PLATAFORMA EN DEFENSA DEL HOSPITAL COMARCAL EL ESCORIAL.
PLATAFORMA SALVEMOS RAMÓN Y CAJAL.
PLATAFORMA CIUDADANA EN DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA DE SAN BLAS – CANILLEJAS.
PLATAFORMA PARA LA MEJORA Y LA DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA DE ALCALÁ DE HENARES.
PLATAFORMA SALVEMOS EL HOSPITAL PÚBLICO DE MÓSTOLES.
ARCO – Agrupación Republicana de Coslada.
AGRUPACIÓN REPUBLICANA DE MÓSTOLES.
CÍRCULOS DE PODEMOS SANIDAD
RPS – FEDERACIÓN DE REPUBLICANOS.
JCE(m-l) – JUVENTUD COMUNISTA DE ESPAÑA (marxista – leninista ).
MUJERES REPUBLICANAS.
PCE(m-l) – PARTIDO COMUNISTA DE ESPAÑA (marxista – leninista ).
SOMOS – SOCIALISMO MOSTOLEÑO.
El presente documento es un inicio y queda abierto a nuevas firmas , para lo cual , cualquier asociación sindicato, colectivo o partido político que desee sumarse y suscribir este manifiesto, puede ponerse en contacto con cualquiera de los firmantes para hacerlo.