André Abeledo Fernández •  Opinión •  15/04/2025

Giro a la derecha en las bajas laborales

El gobierno «progre» PSOE SUMAR, que no de izquierdas, pone en marcha un nuevo sistema en el INSS que producirá un giro radical en las bajas laborales.

El trabajador es menos confiable y será acosado legalmente, porque estar enfermo es un delito y un gasto, un derecho fundamental que nos venden como un privilegio del que los trabajadores abusamos, además causarán más ansiedad y enfermedades mentales a los trabajadores que se sentirán aún más culpables por enfermar o lesionarse, por ser humanos y no máquinas. 

Los médicos de cabecera, los que mejor conocen las dolencias del paciente también pierden capacidad de acción y decisión para desproteger al trabajador.

Hasta ahora, las bajas se hacían efectivas a partir del cuarto día o de forma inmediata en algunos casos, pero ahora la Seguridad Social prepara distintas medidas para controlar estas bajas complicando aún más el proceso para los trabajadores y las trabajadoras.

Desde la Seguridad Social se han implementado nuevas medidas, entre ellas una que tiene que ver con la empresa para la que trabaja el empleado. Estas empresas estarán obligadas a ofrecer información detallada sobre las funciones que realiza el empleado en su puesto laboral.

De esta manera, se podrá analizar cada caso en particular para poder determinar si realmente es justificable la incapacidad temporal del interesado en su puesto de trabajo, traduciendo al lenguaje de la calle la seguridad social entiende ahora como la patronal que los trabajadores pueden trabajar enfermos.

A ello se sumarán más controles de carácter administrativo y evaluaciones médicas, con distintas revisiones periódicas que contribuyan a poder valorar la reincorporación del empleado a su puesto de trabajo, también a aumentar la ansiedad del enfermo y a afectar muy negativamente a su salud mental, esa que dicen que les importa tanto, pero en la realidad no les importa un carajo.

Esto va a suponer que los trabajadores recibirán el alta médica incluso antes de que estén recuperados por completo, lo que significa volver al trabajo enfermos, lesionados y en muchos casos por causa de la demora de la sanidad sin tener ni las pruebas realizadas para conocer el diagnóstico final de su dolencia.

En este sentido, hay que destacar que no hace mucho tiempo, se habló acerca de la posibilidad de que comenzasen a implementarse las bajas temporales intermitentes, las cuales permitirían al trabajador acudir a su puesto laboral durante unos días y permanecer el resto de baja. 

Una idea que las grandes empresas como Mercadona llevan implementando y que ahora el gobierno pretende legalizar, todo un sueño húmedo de la patronal hecho realidad gracias al gobierno de la izquierda de mentira.

En todo caso, ahora será el médico quien envíe de forma directa el informe a la empresa para que exista un mayor control sobre el trabajador y se pasan por el forro la confiabilidad médico paciente y el derecho del trabajador a mantener su enfermedad como algo personal.

Según el gobierno el objetivo principal de los nuevos cambios es el de asegurar que los procesos de incapacidad temporal se manejen de una forma más efectiva, beneficiando tanto a los propios trabajadores como a las empresas para las que trabajan, pero en la realidad solo se beneficia a la empresa y se trata de ahorrar dinero, la salud del trabajador no vale nada ni para la derecha, ni para los progres, ni para los sindicatos del sistema.

Con la llegada de nueva norma, la incapacidad temporal pasará a tener una vigencia máxima de 18 meses, puesto que la Seguridad Social permite bajas de 360 días, más una prórroga de 180 días adicionales cuando el Instituto Nacional de la Seguridad Social determine que el trabajador podrá recuperarse en ese periodo de tiempo, alcanzando así un total de 540 días, si no te recuperas mejor te mueres.

Una vez llegado al final del periodo de baja, el trabajador será sometido a un examen para determinar si puede o no reincorporarse al trabajo, y dado el caso, recibir el grado de incapacidad permanente correspondiente. 

En la práctica el trabajador irá a trabajar enfermo y si seguimos por este camino irá como el «Cid Campeador» a la batalla, muerto y atado al caballo, que para eso somos españoles y mucho españoles.

Ser de izquierdas es estar con los trabajadores y no caer en la falacia de que estar enfermo es culpa del trabajador, que enfermarse es un delito, y que trabajar y sufrir deben ir unidos por el bien del empresario y de España.


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