La patronal se reúne para defender sus intereses, no los nuestros.
Permitir que los mismos poderes económicos que nos ahogan manejen la salida de la crisis, es lo más parecido a un suicidio colectivo.
Si dejamos que sean los oligarcas y los grandes patrones quienes dirijan la reconstrución de la economía, cuando nos demos cuenta habrán levantado una cárcel y seremos simples esclavos asalariados.
Porque la patronal no ve a la clase trabajadora como a iguales, nos ve como a chusma prescindible, algo que se usa hasta que revienta y luego se cambia, ni tampoco ve a esa España que dicen querer como a una madre, la ve como a una puta.
Cuando la patronal se reúne para defender su modelo de «reconstrución pospandemia», es porque quiere imponer uno que no toque sus bolsillos, ni su reforma laboral.
Por eso si realmente queremos un presente y un futuro para nosotros y nuestros hijos debemos tomar las riendas de nuestras vidas y empujar para que las oligarquías no vuelvan a imponer sus condiciones.