El cambio ha comenzado
Popayán, 18 de octubre de 2016
La paz de Santos fue semi-derrotada por él mismo (paz neoliberal).
La guerra de Uribe feneció, el mismo la enterró (pax romana).
El levantamiento guerrillerista ya no tiene sentido (paz insurgente).
Por ello, después del 2 de octubre esos actores buscan a la juventud y al pueblo para encontrar una salida pero ninguno tiene credibilidad. Todos fueron derrotados en el plebiscito.
Seguir detrás de Santos es ir contra el sentido común. Su reforma tributaria y su política salarial, lo acabarán de desgastar.
Uribe ya no es opción ni para los guerreristas. Lo único que lo salva y él desea, es que las FARC vuelvan al monte, pero eso no va a ocurrir.
El fin de la guerra es un hecho irreversible. Lo que ocurre ahora sólo son accidentes (amagues) propios del post-conflicto. Cada quien quiere cuadrarse y acomodarse hacia el 2018.
La tarea nuestra es empezar a construir la «paz estable y duradera», y por tanto, no podemos seguir atados al pasado.
Le corresponde al pueblo empezar a construir la única paz posible, la que resuelva las graves injusticias sociales, recupere la soberanía política y reconstruya nuestra economía preservando la naturaleza.
Un nuevo proyecto político encabezado por la juventud está a la orden del día. Un movimiento que nos ayude a superar la polarización Santos-Uribe.
Ese movimiento debe superar la dicotomía derecha-izquierda.
Deberá construir prácticas de dignidad humana, ética y honradez en la política, y buscar la unión de las grandes mayorías.
Tendrá que clarificar lo «social» y lo «público» superando el «estatismo asistencialista».
En fin, deberá ser cualitativa y creativamente diferente a lo que existe en la actualidad.
Por ello se requiere la imaginación y la inventiva de la juventud.
No lo dudemos… «el cambio ha comenzado».
E-mail: ferdorado@gmail.com / Twitter: @ferdorado