Vistalegre II: ¿Pepsi o Coca Cola?
Pablo e Íñigo:
Cual reyes magos no paráis de recibir cartas, pidiéndoos toda clase de regalos. Y se avecinan las fechas señaladas. Aunque bueno, sabemos que tan magos no sois, o el sorpasso como mínimo ya estaría en el zurrón. Además seguro que coincidimos en que eso de los reyes ya no toca. El caso es que me ha entrado el gusanillo, pero tranquilos, no pienso pediros nada respecto a Vistalegre II. A día de hoy me importa más o menos un pimiento morrón. No veo grandes diferencias entre vuestros dos proyectos, y los otros, en fin… ¿acaso existen? Simplemente os preguntaría: ¿quién es Pepsi y quién la Coca Cola?
¿Sabéis qué me importa mucho más? Que os han adelantado. El Movimiento 5 Estrellas, uno de los partidos con el que más os comparan, después de tumbar un órdago del establishment y hacer dimitir a un presidente, está estimulando el debate más imprescindible a estas alturas, que aquí salvo honrosas excepciones, está silenciado por unos proyectos políticos cobardes: La finitud de los recursos y la crisis de la energía disponible. Han comprendido a Ugo Bardi y su imprescindible Los límites del crecimiento revisados y han pasado a la acción. Aquí tenéis la prueba. Y, ¿sabéis qué es lo más increíble? Que están ganando. Contradiciendo a aquellas voces muy cercanas a vosotros que decían “con un discurso decrecentista no se ganan elecciones”. Pues ahí tienes, Juan Carlos: “¡Zas, en toda la urna!”.
España consume todo el petróleo que produce anualmente —6.419 barriles/día— en día y medio de consumo. Los otros 363 días y medio los tenemos que importar. Y no siempre podremos. No somos un país bien situado para lo que va a venir, y nuestra política tampoco. El M5E tiene unos pocos años más de vida, fallos que seguro vosotros no tenéis, y eso os exculpa, pero no hay tiempo. En Italia el líder del partido está en diálogo con el mejor experto en energía del país. Vosotros tenéis a Nacho Álvarez diciendo que se puede crecer al 6% anual.
El proyecto de Europa se tambalea porque nació deforme y ahora, ya crecido y autoritario, le vemos las extremidades amputadas y sus fronteras y sus mares teñidos de sangre. Es un proyecto que camina sí, pero hacia su probable destrucción. Hay que perder el miedo y atreverse, antes que no haya nada que perder. Tenemos talentos parecidos al de Ugo Bardi en el país y el mismo sol que Italia. Recomendaría a Yayo Herrero, Antonio Turiel o a Jorge Riechmann para que os ayudaran a diseñar la imprescindible transición energética. Lo que no sé es a qué esperáis, como si el Ibex35 o alguno de sus tres brazos políticos os fueran a apoyar. De lo que uno se suele arrepentir es de lo que no se atreve siquiera a intentar.
Quizá por eso cuando veo a gente como Yayo Herrero cerca de ti Pablo, me ilusiono. Porque esa mujer ilusionaría a un tronista. Cuando la escuché hace poco en el debate “De Trump a Le Pen” que organizasteis, llegué a soñar con ella haciéndoos tomar tierra y olvidar el asalto a los cielos. Abandonar la conquista del cielo puede ser la única manera de salvar a los que vivimos en la tierra. Confío un poco aún en vosotros, aunque Echenique no tiene quien le escriba. Igual debería haberle dirigido la carta a él. Espero que no.
PS: Como sé que también te gusta mucho, Pablo, te voy a recordar la frase con la que más sintoniza mi pensamiento: “Hay una ideología real e inconsciente que unifica a todos, y que es la ideología del consumo. Uno toma una posición ideológica fascista, otro adopta una posición ideológica antifascista, pero ambos, antes de sus ideologías, tienen un terreno común que es la ideología del consumismo. El consumismo es lo que considero el verdadero y nuevo fascismo.” (Pier Paolo Pasolini)
Fuente: https://www.15-15-15.org/webzine/2016/12/19/vistalegre-ii-pepsi-o-coca-cola/