André Abeledo Fernández •  Opinión •  20/06/2020

Vivir y morir luchando por un futuro socialista.

En mi juventud el romanticismo revolucionario, mi guevarismo, marcaban mí forma de ver la vida.

Y pensaba que la forma mas honorable de terminala era en alguna guerrilla del mundo con un fusil ena mano luchando por la emancipación de los pueblos.

Este 14 de Junio cumplí 46 años y ahora me doy cuenta de que la vida es la lucha. También este 14 de Junio el Che Guevara cumpliría 92 años de no haber sido asesinado cobardemente en Bolivia por orden de la CIA.

Y de que la forma mas honorable de terminarla es hacer siempre lo correcto, tratar de ser justo y mantener la dignidad y la cabeza alta.

Bien sea en una guerrilla, en un sindicato, en un partido de izquierdas revolucionario, en una cooperativa, en un medio de información alternativo, si luchas por lo que consideras justo y por una sociedad mejor, sin duda sabrás morir como viviste.

Gracias Che Guevara por tú ejemplo en la vida y en la muerte.

Y también gracias a mí abuelo Lino Fernández que murió enfermo en su cama dedicandome su última sonrisa y dándome una lección de como yo quiero terminar mí vida.

Sé que cuando el camino de mí vida se cierre, mis hijos serán el capítulo más bello de mí vida. Y tal vez lo único que he hecho realmente bien. Como dijo Lenin «la revolución empieza en casa».

Ahora ya soy menos romantico y mas practtico, los ideales no han cambiado, ni el objetivo de luchar para que la sociedad avance hacia un horizonte socialista, pero creo que no hay que tener miedo a la muerte, ni prisa por morirse.

Son tiempos de lucha.


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