Ana García •  Opinión •  21/10/2016

El 26 de octubre huelga general educativa ¡No a las reválidas, derogación de la LOMCE!

Después de cuatro años de recortes salvajes, el Partido Popular vuelve a declarar la guerra a la juventud y a las familias trabajadoras. Aprovechando los meses de verano, el gobierno de Mariano Rajoy aprobó por decreto y a escondidas la mayor agresión contra la educación pública en décadas: la entrada en vigor de las reválidas franquistas.

El decreto aprobado por el gobierno en funciones del PP plantea que las reválidas se lleven a cabo este curso 2016/17. Las reválidas suponen multiplicar la actual selectividad por tres, estableciendo así un triple filtro con el que desechará a cientos de miles de jóvenes de entre 15 y 17 años. Estas son sus características:

-Reválida de 4º de la ESO. Consistirá en 7 exámenes con contenidos de 3° y 4º. Quien no la supere no podrá acceder al Bachillerato y tampoco obtendrá el título de la ESO aunque tenga aprobadas todas las asignaturas. Es decir, un estudiante que suspenda esta reválida saldrá al mercado laboral sin titulación, y aunque haya aprobado todo su esfuerzo no servirá para nada.

-Reválida de 2º de Bachillerato. 8 exámenes sobre los contenidos de 1° y 2° que, de no ser aprobada, negará el título de bachiller. Es decir, que se saldrá al mercado laboral únicamente con la titulación de la ESO.

-Reválida de acceso a la Universidad. Además de tener que aprobar la revalida de bachillerato, la ley deja abierta la posibilidad de una tercera selectividad a cargo de la universidad en la que queramos estudiar y, como es previsible, de no ser aprobada nos cerrará las puertas de las facultades.

Las reválidas no buscan la mejora de la calidad de la enseñanza pública. Eso sólo es posible invirtiendo en recursos humanos y materiales que garanticen condiciones dignas en nuestros centros, contratando profesores, aumentando los desdobles, acabando con la masificación… Justo lo contrario de lo que ha hecho el PP recortando más de 7.000 millones de euros en estos años, despidiendo a 32.000 profesores, subiendo brutalmente las tasas académicas o eliminando las becas de libros y de comedor.

A nadie se le escapa quién estará en peores condiciones para superar estos exámenes: los jóvenes de familias trabajadoras que sufrimos la degradación de nuestros institutos que los recortes han provocado. La situación que se vivía hace décadas bajo la dictadura franquista, y que tuvieron que sufrir nuestros padres y abuelos, se quiere imponer por la fuerza. ¡Ellos pelearon para acabar con ese modelo elitista y ahora no podemos permitir que se nos arrebate un derecho tan básico como el derecho al estudio!

La derecha, y aquellos que también aplican recortes aunque se escondan bajo siglas de la izquierda, son los responsables del sufrimiento de millones de familias trabajadoras. ¿Sabe Rajoy o el Ministro de Educación en funciones lo que es para un padre y una madre tener que decidir qué hijo va a la Universidad y cuál no? ¿O peor aún, tener que pedir a un hijo que renuncie a sus estudios y sus posibilidades de un futuro mejor por no tener un salario en casa con el que pagar las tasas? ¿Se imaginan lo que sienten cientos de miles de familias que ven como sus hijos son víctimas del fracaso escolar por falta de profesores, de refuerzos, de apoyos materiales? ¿Y la frustración de toda una generación de jóvenes que, a pesar de sus esfuerzos, son expulsados del sistema educativo injustamente para convertirse en mano de obra barata? A nosotros nos queda claro que si lo saben, no les interesa lo más mínimo.

La LOMCE, el 3+2, los recortes y todas las medidas con las que el PP ha atacado la educación pública tienen un mismo objetivo. No quieren dedicar ni un céntimo de euro a la educación de los jóvenes de familias trabajadoras. Sus planes para nosotros no pasan por que nos formemos y podamos acceder a la cultura y a los estudios superiores, sino por la precariedad laboral y la explotación más descarada.

Desde el Sindicato de Estudiantes, contando también con el apoyo de nuestros padres y madres representados por CEAPA, llamamos a la juventud a la rebelión, a vaciar las aulas de todos los Institutos el próximo día 26 de Octubre en una gran huelga que paralice la educación en todo el Estado y llene las calles con manifestaciones masivas. Llamamos a todos los profesores, padres y madres a salir a la lucha hombro con hombro con el movimiento estudiantil, extendiendo la huelga a toda la comunidad educativa y que éste sea un primer gran paso en una movilización que debe mantenerse y ampliarse. No pararemos hasta conseguir la retirada de las reválidas y la derogación de la LOMCE, y restituyamos el derecho de todos y todas a recibir una enseñanza pública de calidad, gratuita, democrática y laica.

Ana García, Secretaria General del Sindicato de Estudiantes.


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