El mundial femenino ha sido un soplo de aire fresco y limpio para el fútbol
Enhorabuena a la selección femenina española de fútbol por ser campeonas del mundo, y por ser el equipo que más se parece a la sociedad que representan, y a todas y todos nosotros.
Un equipo de mujeres que representan a la España de verdad, a lo mejor del pueblo, mujeres de clase trabajadora: lesbianas orgullosas, gitanas orgullosas, hijas de inmigrantes orgullosas, catalanas orgullosas, gallegas orgullosas, mujeres orgullosas y increíbles deportistas.
Grandes mujeres que representan todo eso que tanto odian los ultras de VOX que dicen defender a España, y también los ultras del PP no lo olvidemos.
Mujeres futbolistas, deportistas de élite, que han ganado el mundial de fútbol femenino sorprendiendo al mundo y dando una alegría a la afición, lo han hecho contra pronóstico y por la puerta grande del buen fútbol y la personalidad propia como equipo de fútbol.
Siempre me ha gustado jugar al fútbol, como muchos niños y ahora también muchas niñas, mi sueño era ser futbolista y con un balón en los pies era el niño más feliz del mundo, pero con 16 años llegó la primera lesión, y bueno siguió la mala suerte.
Pero desde hace un tiempo había dejado de ver tanto fútbol, el fútbol masculino con los Florentinos Pérez, los multimillonarios, los mafiosos y los jeques árabes, se ha convertido en un circo, en un negocio sucio y ha perdido gran parte de su encanto, y en gran medida ha dejado de ser un deporte.
Y el fútbol femenino conserva aún esa frescura, esa épica deportiva, ese encanto de deporte rey aún no contamindo del todo por Florentinos, jeques, mafiosos y multimillonarios.
Ha sido un bonito mundial, con muchas sorpresas, muchos goles, y mucha emoción.
Gracias campeonas por este gran y emocionante espectáculo futbolistico, hacía mucho tiempo que no veía algo tan bueno, tal vez desde el mundial de México de 1986.