Afectaciones a la salud y exclusión laboral: los efectos de las trabas a la homologación sobre los colectivos migrantes
Adelantamos algunos de los datos de un estudio realizado sobre 110 profesionales de la psicología, provenientes de 11 países.
Cuando hablamos de «vidas en pausa», nos referimos a un colectivo dónde un 72,7% tiene más de 5 años de ejercicio profesional en su país de origen. Un 19,3% tiene más de 15 años de ejercicio, un 18,2% de 10 a 15, y un 35,2% de 5 y 10 años. Su profesión es identidad.
Hablamos no solo de licenciaturas de 5 y 6 años. El 60,6% cuenta con formación de posgrado, el 21,1% con al menos una maestría o máster, un 6,4% con al menos 4 años de residencia hospitalaria (como vuestro PIR), y un 1,8% con doctorado.
En lo que refiere a la inserción laboral, el 26,7% no consigue trabajo, 48,8% ha tenido que decidir trabajar de otra cosa. Pero eso no es lo peor, sumemos el horizonte de futuro: un 30,2% cree que tardará al menos 2 o 3 años, un 55,8% lo ve difícil, un 8,1% ya considera que no lo logrará.
El estudio indica también que un 83,6% de las participantes del mismo son mujeres. Es necesario preguntarnos entonces: ¿Las trabas a la homologación, y su consecuente exclusión del mercado laboral serían las mismas si se tratara de un colectivo integrado en su mayoría x hombres?.
Pero bueno, si el trabajo no sobra que la salud no falte ¿verdad?. Tampoco. El 100% afirma que estás trabas han afectado su salud, el 90,3% considera que la situación ha desencadenado un proceso de duelo.
¿Como las afecta?. Cómo era un estudio inicial, exploratorio, apostamos a lo cualitativo, así les dimos una pregunta abierta para que pudieran explayarse. Luego trabajamos agrupando lo que indicaron extrayendo estas categorías a una tabla de frecuencia.
Cómo vemos: Ansiedad, Depresión, inicio de tratamiento, problemas para conciliar el sueño, mal humor, desesperanza, un hermoso catálogo de todo aquello de lo que debería cuidarnos el estado pero nos genera. Pero al parecer no le importa a nadie, ¿por que?, probablemente porque se trata de Mujeres, y de Migrantes, so dos las coordenadas clave entonces: Discriminación por Genero y por Origen.
Respecto al duelo, nuestra hipótesis es que se trata de un duelo migratorio por el status que puede ser de mínima complicado, y en muchos casos a extremo. Y no es algo que se pueda decidir abandonar así sin más, luego se años de estudio y ejercicio, profesión es identidad.
Se trata claramente de una encerrona trágica, la solicitud de homologación (demanda) pone a la homologante en dependencia de una institución que la maltrata. El rol del aparato del estado es claro: no existe allí un tercero de apelación, sino de complicidad.
Mientras tanto el aparato publicitario del estado habla de igualdad, inclusión, feminismo, salud mental, educación superior y movilidad internacional, no dejar a nadie atrás, agenda 2030, discursos que vertidos sobre sus propias víctimas son violencia simbólica pura y dura. ¿Igualdad? Repetimos: 83,6% son mujeres.¿Ministerio de igualdad? Bien gracias. ¿Defensor del pueblo? «Recomendaciones» sin efecto alguno. ¿La espera? Eterna. ¿Xenofobia? Mucha. ¿Machismo? Sin dudas. Por ello hemos planteado la realización de un estudio ampliado, y desarrollado un marco teórico y propuesta para el mismo que puede leerse junto a la fuente de estos datos.
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