Esterilización sin consentimiento y aborto prohibido en República Dominicana: dos caras de la misma moneda

Somos uno de los pocos países del mundo con el aborto totalmente prohibido y uno de los países que lideran el porcentaje de mujeres esterilizadas sin pleno consentimiento o información sobre sus consecuencias. Mientras a unas se les obliga a parir a otras se les obliga a no hacerlo. En ambos casos, el punto es el control sobre los cuerpos de las mujeres.

Recordemos que, cuando en 2019 se generó la Orden Departamental 33-2019 del MINERD para el diseño e implementación de una política de género en el sistema educativo, grupos ultraconservadores lanzaron una campaña de desinformación y miedo sobre una supuesta “imposición de la ideología de género”. El gobierno del PLD congeló la iniciativa y el gobierno del PRM anuló la orden departamental. La consecuencia es que seguimos sin educación sexual y reproductiva en las escuelas, lo que lleva a la alta tasa de embarazo adolescente en el país: 20% de las mujeres entre 20 y 24 años tuvieron un hijo antes de los 18 años, según la ENHOGAR 2019. 

Desde hace años se discute la incorporación de tres excepciones para la penalización del aborto en el Código Penal (CP), las llamadas tres causales. Esto no ha sido posible por la persistencia de las ideologías ultraconservadoras en los partidos mayoritarios en el Congreso y el peso de las iglesias. Recordemos que en el país aún sigue vigente el Concordato firmado en 1954 entre Trujillo y el Papa Pío XII. Por esto siguen muriendo mujeres como la joven Winifer Núñez, víctima de un feminicidio de Estado en 2021 porque no se le practicó un aborto a pesar de que el feto era inviable y su vida corría peligro. La negación del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, aún en circunstancias extremas, se basa en el rechazo a que las mujeres puedan decidir sobre sus cuerpos. Es la expresión de un régimen capitalista y patriarcal que se empeña en controlarnos y destruirnos. 

Otra expresión de dicho régimen capitalista y patriarcal es la esterilización sin consentimiento. El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) indica, en base a encuestas del Estado dominicano, que alrededor del 23% de las mujeres dominicanas no son libres de tomar decisiones sobre su salud sexual y reproductiva y que el 46% no tiene acceso a métodos anticonceptivos. El método anticonceptivo más utilizado en el país es la esterilización, a la que recurren 30.5% de las mujeres en edad reproductiva casadas o unidas. RD ocupa el segundo peor lugar entre 40 países encuestados, con una de cada cuatro mujeres que no sabía que la esterilización a la que se sometieron era irreversible. Tanto organizaciones de mujeres con discapacidades, como de mujeres inmigrantes haitianas y dominicanas de ascendencia haitiana han denunciado que sufren con frecuencia esterilizaciones forzadas por motivos discriminatorios. 

La ginecóloga Lilian Fondeur afirmó en una entrevista este año que ha sido testigo de “madres que llevan a sus hijas para que las esterilicen, mujeres que creen que tienen un problema de infertilidad y que no saben que les ligaron las trompas”, así como también a mujeres víctimas de abuso a las que se obliga a llevar el embarazo a término. “Al final, las que no deciden son ellas. Bien decide el sistema, bien el personal de turno. Son consideradas personas de segunda, no seres humanos con derechos”, explicó.

La situación es grave y debe llamarnos a organizarnos y luchar. República Dominicana sigue con más de un siglo de atraso en materia de derechos de las mujeres. Debemos continuar construyendo una organización de mujeres independiente, autónoma y combativa, para ser el ala izquierda de un gran movimiento de mujeres que haga realidad en las calles la exigencia de educación sexual y reproductiva para decidir, anticonceptivos para no abortar, y aborto legal para no morir.

Fuente: MST Rep. Dominicana