André Abeledo Fernández •  Opinión •  29/09/2017

Cataluña tiene que tener voz. No caigamos en la trampa del odio y del rencor al que piensa diferente

La represión y las amenazas no dan soluciones, enquistan los problemas y radicalizan las posiciones. Los conflictos políticos no se debaten en juzgados, no se resuelven aplicando leyes y mucho menos con presos políticos en las cárceles.

No hace falta ser bombero para saber que un incendio no se apaga con gasolina. Otra cosa es ser un pirómano, como el PP en Cataluña.

Eurodiputados y políticos de todas partes, condenan la actuación del gobierno español.

Participé en la concentración solidaria con el pueblo catalán, me solidaricé con el pueblo, porque yo no estoy ni con Rajoy, ni con Puigdemot, ni con la burguesía española, ni con la burguesía catalana. Pero digo SI al derecho del pueblo catalán a hablar en las urnas.

La voz del pueblo siempre debe de ser escuchada, y las urnas son buenas herramientas para que el pueblo hable, no son armas, ni bombas que deban ser desactivadas.  

Defiendo tú derecho a pensar, a expresarte, a decidir, a votar, y para defenderlo no necesito que pienses como yo.

Defender que la represión no es un argumento, es posicionarse con la justicia, desgraciadamente, con la ley, se ve que no, desgraciadamente para los pueblos de Esapaña.

Mi apuesta personal sería una República Federal, una República de todas y todos. Solidaria y socialista. Yo votaría por ella.

Hay otros modelos y en un Estado plurinacional como el nuestro el debate debe estar abierto.

Son tiempos donde es necesario hablar sin miedo, debatir, argumentar hasta la saciedad, no autocensurarse. El diálogo es el camino, es el único camino para la convivencia.

Los pueblos debemos mantener la calma y el sosiego que no tienen los que nos gobiernan.

No caigamos en la trampa del odio y del rencor al que piensa diferente.

En este necesario debate debemos hablar de todo, de autodeterminación, de modelo de Estado, de una nueva Constituyente.

Una Constitución es una herramienta de la que se dotan los pueblos, no es la Biblia, puede ser modificada para que sea mejor herramienta, adaptarse a nuevos tiempos y nuevos problemas a los que como sociedad debemos dar soluciones.

Somos pueblos hermanos, y los hermanos pueden hablar, pueden entenderse.

André Abeledo Fernández Concejal de EU Narón, militante comunista y sindicalista.


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