¡Basta ya de jugar con nuestro futuro y nuestra salud!

Hace semanas que las y los estudiantes universitarios estamos denunciando que, a pesar de llevar todo el curso con clases online, en la cresta de la tercera ola se nos está obligando a realizar los exámenes presencialmente. Tal como señalamos hace unos días desde el Sindicato de Estudiantes, esta irresponsabilidad del ministro de Universidades, Manuel Castells, y los rectores de las universidades, no ha ido acompañada de ninguna medida para asegurar que podamos realizar los exámenes de forma segura, por lo que las aglomeraciones en los pasillos y en las propias aulas se han convertido en la norma.

A pesar de que la realidad se cae por su propio peso, el pasado viernes tuvimos que leer en un comunicado del ministro que, tras reunirse con la conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, ¡le habían asegurado que todas las medidas sanitarias se están cumpliendo en los exámenes presenciales del mes de enero! ¿¡Pero qué tomadura de pelo es esta!? Solo hace falta pasar por cualquier facultad, preguntar a cualquier estudiante o profesor, o echar un vistazo a las fotos que multitud de estudiantes han publicado en las redes para denunciar este caos del que somos víctimas.

Llevamos meses siguiendo las clases online y no podemos juntarnos con nuestros familiares y amigos en reuniones de más de 6 personas,  pero resulta que ahora no hay ningún problema en ir a realizar los exámenes de forma presencial en un transporte público masificado o en juntarnos 150 o 200 personas en un aula para realizarlos. En medio de un repunte salvaje de los datos de contagio ¡Encima nos dicen que todo está bien y no hay  de qué preocuparse! ¡Basta ya de tomarnos por tontos!

Por ello desde el Sindicato de Estudiantes exigimos al Ministerio de Universidades que deje de hacer oídos sordos a nuestras demandas y empiece a escuchar la voz de los estudiantes de una vez por todas:

1. Cancelación inmediata de todos los exámenes del semestre en esta situación de emergencia sanitaria, y que estos se sustituyan por distintas formas de evaluación adaptadas a la situación extraordinaria que padecemos: trabajos de las diferentes materias, presentaciones del contenido ante los profesores, debates entre estudiantes para poner en común lo cursado en la materia…
2. Puesta en marcha un plan urgente de rescate económico a la Universidad pública que garantice su gratuidad real tanto en tasas, como en transporte, libros y vivienda en el caso de desplazamiento; la creación de miles de plazas para que todas y todos los que queramos acceder a los estudios superiores podamos hacerlo; la creación de miles de plazas fijas y la dignificación de las condiciones laborales para los docentes asociados a la universidad;  la gratuidad de la conexión a Internet y el reparto masivo de dispositivos digitales para acabar con la brecha digital.
3. ¡Medidas para proteger a la clase obrera y la juventud ya! Garantizar nuestro derecho a la salud y a una vida digna dentro y fuera de las aulas. Sanidad pública y de calidad con garantías de acceso a los hospitales y centros de salud. Nacionalización de la sanidad privada y las eléctricas y utilizar todos los recursos disponibles para que nadie quede expuesto a la Covid y al frío. Acceso a una vivienda pública digna y accesible, con los recursos necesarios para una conexión a internet que garantice nuestro derecho a la educación.