CCOO •  FSC-CCOO •  Opinión •  19/11/2022

Los problemas del sector del transporte de mercancías por carretera son estructurales, no coyunturales

Los problemas del sector del transporte de mercancías por carretera son estructurales, no coyunturales

El incumplimiento de la legalidad en nuestro sector es generalizado, no solo en la ley de costes o en la participación de los conductores en la carga y descarga. Tampoco se respetan los convenios colectivos, se camuflan en dietas las horas de presencia (cuando se pagan) con el consiguiente fraude a la Seguridad Social, no se pagan horas extraordinarias, se domicilian las empresas en la provincia más barata y no donde se realiza la actividad para así pagar menos salarios y cotizar menos a la Seguridad Social. Ni siquiera se respeta la legislación europea que prohíbe cobrar por kilómetro. Cualquier operativo de control de los tiempos de conducción y descanso se salda con la mitad de los vehículos sancionados.El sector está sumido en un fraude continuo y precisa de un guardia civil y un inspector de trabajo por camión, si se pretende hacer cumplir la ley. Ni la Inspección de Transporte ni la Inspección de Trabajo tienen medios suficientes para vigilar el cumplimiento de la legalidad hasta el punto de que, teniendo registros detallados de las jornadas de trabajo en los tacógrafos, la Inspección de Trabajo no cuenta con personal que sepa interpretarlos.Con este nivel de fraude se necesitan medidas estructurales, pero si quien está dirigiendo el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en el sector de transporte de mercancías por carretera es el CNTC (que representa a las patronales del sector), es obvio que no se buscarán soluciones legales ni mediante la negociación colectiva. El III Acuerdo General del Transporte de mercancías lleva sin avances en la negociación desde 2018 y una de las patronales incluso se niega a sentarse.Resulta inviable controlar que no se trabaje por debajo de costes, partiendo de que los costes salariales son distintos en cada provincia y de que son los propios trabajadores autónomos quienes, al carecer de autonomía, acaban aceptando trabajar por debajo de costes, devaluando los precios y los salarios del sector.En una decisión política España optó en su día por un modelo de sector del transporte de mercancías por carretera basado en la atomización, de forma que hasta el Estatuto de los Trabajadores en su art. 1.3 g) establece la particularidad de que si posees una autorización de transporte no eres una persona asalariada, aunque trabajes para una única empresa y dependas de ella, en una circunstancia que no ocurre en ninguna otra profesión.El elevado desempleo, sacarse el permiso de conducir durante el servicio militar, las distintas reconversiones, así como la apertura de la Unión Europea a países del Este hicieron de la profesión de conductor un refugio de personas desempleadas que ahora rechaza la juventud e incluso los propios conductores buscan puestos de trabajo alternativos dada la penosidad y precariedad de la profesión.Por otro lado, la comodidad que supone para las empresas cargadoras la posibilidad de externalizar los riesgos y reducir costes subcontratando el transporte a un trabajador autónomo ha llevado a situar a España en la antepenúltima posición en toda Europa de empresas con menor número de trabajadores, con una media de 3,3 asalariados por empresa. España cuenta con aproximadamente 450.000 asalariados y con 110.000 autónomos en el sector, con el 85 % de las empresas siendo microempresas o autónomos.Este modelo atomizado fomentado por las grandes empresas y asumido por los distintos gobiernos para derivar costes y riesgos, es el germen del problema. Sin embargo, el Gobierno y el CNTC prefieren pactar rescates y subvenciones al sector en lugar de afrontar una reestructuración que acabe con esta anomalía de atomización empresarial y falsos autónomos porque con este sistema obtienen mejores resultados.Desde CCOO hacemos un llamamiento al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a activar la mesa social del transporte y abordar los problemas del sector de manera urgente. Si el Ministerio y el CNTC rechazan nuevamente el diálogo y siguen sin negociar ni adoptar medidas para rescatar a los asalariados del sector, los conflictos continuarán.Exigimos dignidad:La efectiva negociación del III Acuerdo General de Transporte de mercancías por carretera.Jubilación anticipada.Cumplimiento de la normativa europea que prohíbe pagar por kilómetro.Un plan de choque de lucha contra el fraude que adopte medidas contra los falsos autónomos y la competencia desleal.


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