Ecologistas en Acción exige que se acelere la construcción de un almacén geológico en profundidad para residuos radioactivos

Ecologistas en Acción de Extremadura ha presentado esta semana sus alegaciones al proyecto de ATI-100 (Almacén Temporal Individualizado) y a su estudio de impacto ambiental correspondiente.
La organización ecologista encuentra inadmisible que se pretenda la custodia en superficie de los residuos radioactivos durante casi cincuenta años cuando su destino final va a ser un Almacén Geológico en Profundidad que no acaba nunca de definirse ni de proyectarse. Para Ecologistas el objeto de esta demora por parte del gobierno tiene como objetivo que las eléctricas Iberdrola, Endesa y Naturgy eludan en el presente el pago de la enorme cifra que supondría la construcción de un Almacén Geológico en Profundidad, cerca de 20000 millones de euros y se posponga dicha construcción hasta 2073, cuando se han estado lucrando durante las últimas décadas con la producción de una energía sucia y peligrosa.

El proyecto de ATI-100 es solo un paso intermedio en Almaraz, pues según el 7º Plan de Residuos Radiactivos, en cada central deberá ponerse en marcha, posteriormente, un Almacén Temporal Descentralizado, aún sin proyecto concreto, que se conformará con el ATI actual y el ATI-100 en ciernes, más instalaciones complementarias y/o medidas adicionales, que permitan realizar las operaciones de mantenimiento y reparación de los contenedores, para garantizar su función de recuperabilidad. Estos ATD deben permanecer operativos hasta el traslado de todo el combustible nuclear gastado, los residuos radiactivos de alta actividad y los residuos especiales al Almacén Geológico en Profundidad. El problema es que se está diseñando el ATI-100 sin tener el proyecto del ATD y la losa sísmica no se puede modificar tras su instalación en el ATI-100.

Tampoco se ha puesto a disposición pública toda la información relevante del proyecto, ni se ha considerado que su ubicación está próxima a centros de ocio. En el proyecto también faltan datos relativos a las medidas de protección radiológica y del impacto radiológico en caso de accidente.

También existen otros peligros derivados de un ineficiente análisis de riesgo de incendios en las instalaciones y no se ha contemplado que la custodia de bidones con material radioactivo durante décadas nos expone a un más que probable riesgo de sobrecalentamiento de los mismos, dado que su diseño no está adaptado a las temperaturas que en las próximas décadas pueden rebasar los 50 grados centígrados debido al calentamiento global.

El estudio de impacto ambiental no toma en consideración que pueda haber incidencias que  posibiliten la contaminación radiactiva de masas de agua superficiales y/o subterráneas que comprometan al río Tajo hasta su desembocadura.

Ecologistas en Acción solicita una declaración ambiental negativa del proyecto y que se acelere el proyecto de creación de un Almacén Geológico en Profundidad que albergue los residuos radioactivos de las centrales nucleares costeado íntegramente por las empresas que se han estado lucrando con esta sucia, peligrosa y fraudulenta actividad.