Redacción •  Actualidad •  27/08/2024

Juantxo López de Uralde pide a la primera ministra de Dinamarca que no extradite al activista Paul Watson 

  • El coordinador de Alianza Verde, Juantxo López de Uralde, ha remitido una carta este martes a la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, en la que se suma a la oleada de solidaridad y presión internacional que está recibiendo el activista ecologista Paul Watson, detenido el pasado 14 de julio en Groenlandia a petición de Japón.
Juantxo López de Uralde pide a la primera ministra de Dinamarca que no extradite al activista Paul Watson 

27 de agosto de 2024.- Desde entonces, Watson está detenido en la capital de la isla a la espera de que el Ministerio de Justicia danés decida sobre su extradición a Japón, donde se enfrenta a una pena de prisión de 15 años y a una multa de 3.000 euros.

López de Uralde, que ya se dirigió al primer ministro islandés el pasado mes de junio, precisamente para evitar que su país volviese a autorizar la caza de ballenas, ha recordado a Frederiksen “La cada vez mayor oposición que la caza de ballenas tiene en una sociedad altamente concienciada contra el sufrimiento de los animales, de cualquier tipo”.

También ha querido poner de manifiesto que “Son numerosas las peticiones para la liberación de Paul Watson que su país ha recibido, desde la sociedad civil, a través de las organizaciones ecologistas y las muchas expresiones espontáneas de la ciudadanía en todo el mundo, pero también desde gobiernos europeos que no comprenderían que un país de la Unión Europea extraditase a un ciudadano por ejercer activismo medioambiental en defensa, en este caso, de las ballenas”.

Por eso, le ha solicitado que no autorice la extradición de Paul Watson a Japón. En su escrito señala que “Dinamarca, junto con el resto de la Unión Europea, tiene la oportunidad de enviar un mensaje en defensa del movimiento ecologista, del medio ambiente y de los animales, y en contra de la crueldad de una práctica ilegal, que debe ser erradicada”.

López de Uralde, precisamente, estuvo detenido en una cárcel danesa en 2009, cuando era director de Greenpeace, por irrumpir en la cena de gala de la cumbre del clima, que se celebraba en Copenhague, y que reunía a más de 150 jefes de Estado y de Gobierno, desplegando una pancarta que decía “Los políticos hablan, los líderes actúan”.