El comunismo es ejemplo y el ejemplo empieza en casa para con nuestros hijos

Como dijo Lenin  la revolución empieza en casa. Y una madre o un padre deben de tratar de transmitir a sus hijos valores que en un futuro les servirán de escudo moral.

En mi caso trato de que entiendan que es más importante ser que tener, o como dice el dicho, “no es más feliz quien más tiene sino quien menos necesita para vivir”.

Yo a mis hijos les regalo momentos que no cosas, juegos que no juguetes, abrazos y besos, tardes de estudio y deberes, comparto cuentos y conversaciones, les doy complicidad y comprensión.

Yo que he vivido un tiempo en Brasil se lo que significa darles una infancia «despreocupada», su preocupación es estudiar, aprender, jugar y conocer. Desgraciadamente en este mundo capitalista esto es un verdadero privilegio pues millones de niños y niñas deben preocuparse de sobrevivir.

Nadie puede evitarles problemas y realidades pero en lo que este en mí mano sus preocupaciones serán solo la que debería tener un niño.

Nosotros hablamos de todo, de igual a igual y de padre a hijo. Yo trato de contestar a sus miles de preguntas, pero no comparto mis problemas pues ya tendrán los suyos.

No son «cosas» las que dan momentos de «felicidad», lo que importan son los «momentos».

André Abeledo Fernández, Concejal de EU de Narón, militante comunista  y sindicalista.